José Antonio Suárez y Alberto Iglesias arrancaban el Supercampeonato del mismo modo que cerraban la temporada pasada, dominando con el Skoda Fabia RS Rally2. Los asturianos del equipo Recalvi conseguían la victoria de la primera cita del supercampeonato, en las exigentes especiales de Lorca, prueba marcada por los intermitentes chubascos y un plantel de pilotos de alto nivel. “Cohete” también se imponía en el TC+ por lo que
Alejandro Cachón conseguía la victoria en dos de las siete cronometradas disputadas a bordo del novísimo Toyota GR Yaris Rally2, mientras que Diego Ruiloba le ganaba la partida en ultima instancia a Gus Greensmith para colocarse en el podio, en un curioso triplete de pilotos asturianos, éste último a bordo del Citroën C3 Rally2 oficial.
Tras Greensmith se clasificaba Efren Llarena, que venía a rodar aquí con la idea de ponerse a punto para una nueva temporada continental. Le seguía el joven Oscar Palomo y el Hyundai, y el mexicano Alejandro Mauro, con el Fabia.
Entre los abandonos destacados, los Hyundai de Iván Ares, Sergi Pérez y Pepe López se veían obligados a abandonar, sobre todo éste último cuando peleaba por la victoria con “Cohete”.
Alex Español conseguía ser el mejor de tracción delantera y la victoria en la Beca Júnior RTS, mientras que Aritz Iriondo imponía su experiencia para conseguir la victoria en la Clio Trophy Spain Tierra. Por su parte, David de la Osa era quien se llevaba la Copa Kobe Motor.